Buenos Aires

Buenos Aires fue mi primera experiencia estudiando en el extranjero, así como la primera vez viviendo fuera, pese a que había estado una corta temporada viviendo en Londres con el objetivo de perfeccionar el inglés.

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Tengo que reconocer que al principio me daba respeto el hecho de cruzar el charco y estar tan lejos de casa sin saber lo que iba a depararme, pero mi intención de realizar un intercambio fuera de Europa con el objetivo de poder conocer nuevas culturas y fronteras me hizo seguir hacia adelante.

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Una de las cosas que más me sorprendió al principio fueron las grandes dimensiones de la ciudad, la primera semana tardaba dos horas y media de camino a la facultad. La universidad era proporcional a la envergadura de la ciudad, formada por nada más y nada menos que 30.000 estudiantes, siendo muy caótico al principio dada la cantidad de gente, cátedras y aulas que está tenía.

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Pude experimentar y vivir las diversas obras de Clorindo Testa y Amancio Williams entre muchos otros, así como participar en diferentes workshops relacionados con la disciplina y trabajar en un estudio porteño, aprendiendo nuevas formas de la enseñanza.

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Finalmente, pude hacerme a la ciudad así como a la universidad compartiendo la experiencia con personas de culturas muy diferentes, hecho muy gratificante a nivel personal pudiendo así entender diferentes opiniones y formas de ver el mundo.